ENTREVISTA AL DUEÑO DEL EXTINTO 'IBERIA AIRLINES F1'
"Bueno, realmente HRT no es el primer equipo español que participa en Fórmula 1. Sí que lo es como constructor pero no como concursante. Ellos tienen un chasis italiano, Dallara, y el primero nuestro, en 1977, fue inglés, un McLaren. Pero nosotros tuvimos cuatro equipos -Iberia Airlines, Centro Asegurador, Madon y Banco Occidental- antes de que se fundara Hispania.
No pretendo rivalizar pero la historia no la podemos reescribir". Emilio de Villota aclara para El Confidencial los matices que hay que tener en cuenta cuando a la futura escudería de Pedro de la Rosa se la califica como pionera en nuestro país. Las crónicas de la época dan la razón al ex piloto. "El equipo español Centro Asegurador Fórmula 1…", se podía leer en un artículo del 2 de abril de 1978 en el diario ABC.
De la Rosa ha puesto de moda la escudería española y ha dado impulso a una estructura que aspira a asentarse en el Gran Circo. Algo que no pudo hacer De Villota 40 años atrás, cuando tenía que explicar que "un Fórmula 1 es un coche con las ruedas por fuera" y un piloto privado podía comprar coches de 'clase B' de escuderías potentes. Este medio se ha puesto en contacto con el protagonista de la, hasta hace dos años, mayor aventura nacional en la F1 y se ha topado con una persona entregada a la causa de HRT, un verdadero 'fan'.
Es difícil encontrar un profesional que lleva cerca de 50 años en este deporte con tanta ilusión por un proyecto que, en principio, ni le va ni le viene. Pero De Villota, tras poner los puntos sobre las íes en eso de que Hispania es el primer equipo español, se muestra encantado por el devenir del equipo nacional. "No quiero restar ni un ápice de mérito a HRT. Tengo mucha ilusión a pesar de las penurias y circunstancias que pasaron al principio, esto refleja la dificultad de poner un equipo en parrilla".
Sin rastro de sus bólidos setenteros
De Villota es consciente del trabajo que supone estar en la línea de salida cada temporada. Con nostalgia recuerda como "año tras año tuve que vender los coches para competir. El primero fue uno artesanal que se fabricó para participar en la Fórmula 5000 inglesa. Se vendió para adquirir el McLaren M23 con motor Cosworth para el equipo Iberia; este se tuvo que traspasar para comprar el Lotus de 1978 que, a su vez, también se vendió para correr con el Williams… es una pena pero no ha quedado nada de esos coches desgraciadamente".
Volviendo a la actualidad, el ex director de una sucursal del Banco Ibérico desprende un entusiasmo que contagia. Entiende que España está ante una oportunidad única, un escaparate que se debe cuidar para mostrar al mundo que este país tiene un hueco en la élite del automovilismo. "Debemos hacer todo lo que podamos para protegerlo. Es un orgullo para España y da igual que quedemos primeros, en la mitad o al final, el tiempo irá consolidando al equipo".
Lo importante es estar y crecer.
Su experiencia avala las opiniones que vierte. Emilio es de las pocas personas en España que están capacitadas para dar consejos en el Gran Circo. Dentro de este selecto club hay otro que se llama Luis Pérez Sala, del que considera "muy importante su incorporación a HRT: ha dado aire fresco. Es tremendamente maduro y reflexivo. Es de esas personas que trabaja sin hacer ruido y cuya labor es clave".
"De la Rosa afianza la personalidad española"
En el cambio de Hispania a HRT, la escudería ganó en "solidez, credibilidad y solvencia". Le gusta el giro que ha dado el equipo tras la salida de José Ramón Carabante –con quien habló para unir posturas entre Hispania y su hija, María de Villota- porque con Thesan Capital ha llegado la españolización: "De la Rosa afianza la personalidad española. Además de Luis, han venido también ingenieros nacionales y la idea de traer la sede, aunque suponga una traba por el tejido industrial, provocará que el equipo sea más nuestro".
Queda fuera de toda duda que el primer 'explorador' español que se adentró en la selva de la Fórmula 1 da su bendición a HRT y a los pasos que está dando. De hecho, se muestra "incondicional a lo que me pidan". Aprovechando que Emilio lleva 30 años trabajando en su academia para la formación de pilotos… ¿habrá en un futuro un proyecto de cantera?
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