El balear necesitó dos horas y seis minutos para superar a Ferrer y ahora se enfrentará al serbio Novak Djokovic, que derrotó al suizo Roger Federer en la otra semifinal por 6-2 y 7-6.
El español Rafael Nadal, número 3 del mundo, alcanzó hoy la final del
Masters 1000 de Roma por séptima vez en su carrera tras eliminar a su
compatriota David Ferrer, sexta raqueta del circuito, que le puso las
cosas difíciles en el primer set, pero acabó claudicando por 7-6(6) y
6-0.
En una abarrotada pista central del Foro Itálico, sede del torneo, el
balear necesitó dos horas y seis minutos para superar a Ferrer y ahora
se enfrentará al serbio Novak Djokovic, que derrotó al suizo Roger
Federer en la otra semifinal por 6-2 y 7-6.
Nadal se ha coronado en cinco ocasiones en sus siete participaciones
hasta ahora en la arcilla roja de Roma, donde el año pasado cedió su
cetro a Djokovic por un doble 6-4.
Con su victoria de hoy, el mallorquín se confirma como una de las
"bestias negras" de Ferrer, quien solo ha conseguido imponerse en cuatro
de las 19 ocasiones en las que ambos se han enfrentado y solo una sobre
la arcilla.
En el último de esos encuentros, en el Torneo Conde de Godó de
Barcelona, el valenciano puso en dificultades al balear, por lo que este
se había mostrado precavido ante este nuevo choque.
El inicio de la semifinal de hoy pareció dar la razón a Nadal, pues
en el primer set, muy disputado y que se alargó una hora y 26 minutos,
el mallorquín estuvo siempre a remolque hasta el séptimo punto de la
muerte súbita.
Pese a perder la primera manga, los números habían estado de la parte
de Ferrer, que dispuso de 10 bolas de ''break'', de las que aprovechó
solo una, mientras que obtuvo un 76 por ciento de los puntos con su
primer servicio, respecto al 68 por ciento de Nadal, mientras ambos
coleccionaron 20 errores no forzados.
Todo daba a entender que iba a ser un partido muy igualado como el
que se vio en Barcelona y muestra de ello fue el segundo juego de la
primera manga, que duró catorce minutos.
Un juego en el que Nadal se vio obligado a anular las siete bolas de
rotura de las que dispuso el valenciano para lograr ganar su servicio.
Con 2-1 a favor, Ferrer asestó el primer ''break'' del encuentro al
mallorquín, que se lo devolvió en el siguiente juego y con 3-2 en el
marcador, Nadal endosó uno en blanco al número seis del mundo. Sin
embargo, el primer parcial continuó con la igualdad entre ambos
obligando al desempate.
La remontada del primer set acometida por Nadal dio confianza al
mallorquín, mientras que Ferrer pareció acusar el golpe y fue
deshinchándose en la segunda manga. Ya en su primer turno al servicio
encajó un ''break'', tras lo que el mallorquín puso la directa y de poco
sirvieron los intentos de Ferrer por aguantar la embestida.
Nadal se movió mejor y más rápido en la pista en esta segunda manga,
que duró solo 40 minutos, en la que Ferrer plantó dura batalla en el
cuarto juego, en el que se llegaron a registrar siete iguales antes de
que el balear se lo adjudicara.
A partir de aquí, con un Ferrer fuera del encuentro, para el
mallorquín las cosas fueron cuesta abajo y sentenció la manga en el
primer punto de partido del que dispuso.
Es la primera vez en su historia, desde 1973, que el torneo de Roma
ha visto llegar a las semifinales a tres jugadores que han ocupado el
número uno del ránking: Nadal, Federer y Djokovic.
En su avance en el torneo romano, Ferrer no había cedido, hasta hoy,
ningún set, en sus encuentros ante el español Fernando Verdasco, en su
debut en la segunda ronda, el francés Gilles Simon en octavos y ante
Richard Gasquet, en cuartos.
Nadal, por su parte, había cedido hasta el momento su servicio solo
en una ocasión durante el torneo ante el checo Tomas Berdych, en el
encuentro de ayer en cuartos de final.