La Comisión Europea quiere relanzar el proyecto común de asilo
Inmigrantes tunecinos en la estación italiana de Rimini el pasado mes de abril.
Ante la falta de avances sobre un sistema europeo de asilo, inicialmente previsto para 2012, la Comisión Europea propuso este viernes que el presupuesto comunitario compense a los países que acojan a refugiados con una suma económica. La propuesta, todavía sin detallar, tiene que ser debatida por los gobiernos de la Unión Europea y la Eurocámara, pero pretende acabar con las buenas palabras que los países del norte suelen dedicar a los del sur.
"Hemos oído muchas declaraciones sobre la solidaridad en materia de asilo, en particular el año pasado, pero no hemos visto mucha acción", aseguró este viernes la comisaria de Interior, Cecilia Malmström, en referencia a las oleadas de inmigrantes y refugiados procedentes de los países del norte de África. "Ya no es tiempo de palabras: los valores de solidaridad, tolerancia y respeto mutuo deben traducirse ahora en resultados concretos", añadió.
El sistema continental debería estar en marcha en 2012
Entre sus propuestas están reforzar la Oficina Europea de Apoyo al Asilo con más funcionarios para asesorar a los países que no dan abasto con las solicitudes, "aumentar los fondos disponibles para los estados miembros" y favorecer "el reasentamiento de los beneficiarios de protección internacional entre estados mediante ayudas financieras".
Aunque Bruselas distingue claramente entre inmigración irregular y asilo por motivos políticos o riesgo para la vida del solicitante, las deficiencias en los mecanismos europeos son similares. Los países del sur de Europa, como Italia, Malta, España o Grecia, están expuestos de manera especial a las presiones migratorias y se quejan de que sus vecinos del norte no hacen nada por ayudarles a pesar de que ya no hay fronteras terrestres y los recién llegados pueden moverse libremente de un Estado a otro.
Temores de los nórdicos
El presupuesto para el periodo 2014-2020 rondará los 3.900 millones
Entre los países más reticentes a aumentar su acogida están Alemania, Francia y los nórdicos, temerosos de que si flexibilizan sus condiciones podría producirse un efecto llamada y multiplicarse las solicitudes. "Los sistemas de asilo de algunos países no funcionan demasiado bien, y otros dan refugio a un número demasiado pequeño de solicitantes", recordó la comisaria.
En casos como el de Malta, un país con poco más de 400.000 habitantes, la situación es la contraria. Malta, que el año pasado fue el destino de miles de inmigrantes y solicitantes de asilo tunecinos, tiene "un número de demandantes que no es proporcional con su talla", por lo que necesita de la solidaridad del resto de países.
Para los reticentes
Para el próximo ciclo presupuestario, entre 2014 y 2020, la Comisión pretende gestionar un presupuesto para políticas de inmigración y asilo de 3.900 millones, lo que debería facilitar el apoyo financiero europeo para países reticentes a aceptar refugiados.
Sin embargo, tanto esta dotación como la puesta en marcha del sistema europeo con reglas comunes sobre el asilo depende del beneplácito de los gobiernos, partidarios por el momento de mantener sus competencias nacionales en la materia.
En 2009, se presentaron 317.000 solicitudes de asilo en toda la UE concentradas en seis países: Francia, Alemania, Reino Unido, Bélgica, Suecia e Italia. Sólo se aceptó una de cada cuatro. Este año se prevé un gran incremento, tras el 14% más de solicitudes de asilo registradas en el primer semestre de 2011, respecto al primer semestre de 2010.
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