García Abad, tras Alonso, este año en Suzuka.
"Mira el paddock, cada piloto tiene un mánager, el representante está aquí y en la vida del piloto". En Singapur, Anthony Hamilton puso de relieve la crisis de su hijo al cuestionar el papel de una figura omnipresente en el mundo de la Fórmula 1, poniendo también de relieve el papel más o menos trascendental que juega en la carrera deportiva de sus pilotos.
¿Es imprescindible contar con un agente, como apuntaba Hamilton? ¿Qué papel y funciones desempeña? ¿Hasta donde alcanza su campo de acción?
"Para entrar en la Fórmula 1 es imprescindible un mánager, porque cuando eres joven no tienes todos los contactos", explica Marc Gené a El Confidencial, por no hablar de la madurez de adolescentes con poca experiencia vital. Fernando Alonso y Schumacher, por ejemplo, llegaron gracias al apoyo –compensado a porcentaje de ganancias- de Flavio Briatore y Willi Webber. "Yo ahora no tengo", explica Gené al respecto, "pero sí los tuve para entrar en Fórmula 1 y fueron muy importantes para mí".
La excepción sería "un operador" según Gené, como es el caso de Red Bull, "y de Vettel y Jaime Alguersuari. En este caso, no necesitas el representante para nada". Sin embargo, avisa Gené, "es en estos momentos de tu carrera cuando también hay que tener cuidado con quién se acerca y te juntas, porque puedes unirte a quien no te conviene y, a veces, se firman contratos de larga duración".
Lauda: "Si eres listo solo necesitas un asesor fiscal"
"Hay un grupo de mánagers establecidos en la Fórmula 1 que conocen bien el medio, y es difícil que cometas un error con ellos", explica Gené, pero también se dan casos en que la relación tiene graves consecuencias para la carrera del piloto. Este fue el caso de Button y sus problemas con Williams-Bar o de Nico Hulkenberg este mismo año, quien rompía su relación precisamente con Willi Webber, alguien que estuvo detrás de Schumacher toda su carrera.
"Contar con un mánager puede ser negativo", explica Gené, "pero aquí es el piloto el que debe asegurarse alguien que le dé un valor añadido". Niki Lauda, por ejemplo, criticaba esta dinámica en la Fórmula 1 con Sebastian Vettel como botón de muestra. "Es cómo éramos nosotros. No tiene mánager, nada. Si eres suficientemente listo solo necesitas un asesor fiscal. Yo siempre negocié los contratos, los pilotos sabrían más si los hicieran ellos". En su caso, Marc Gené negocia personalmente con Peugeot y Ferrari, "sé lo que debo hacer, no me aporta más que pagar una comisión por algo que puedo hacer yo".
Pero la realidad es que prácticamente todos los pilotos tienen agentes para cubrir una o varias áreas relacionadas con su actividad y así concentrarse en su trabajo. "Cuando estás en la Fórmula 1 es imposible no tener a alguien que te ayude, es totalmente imprescindible, porque tienes que dedicarte totalmente a la conducción".
'Pack' completo o servicio a la carta
Para empezar, el representante ha de conocer y tener acceso a los contactos adecuados y sondear constantemente el mercado. La competencia es brutal, desde dentro y también desde fuera. No es igual gestionar la llegada de un Charles Pic por parte de Olivier Panis, que el retorno de Kimi Raikkonen por Steve Robertson, o la misión de Richard Goddard con Jenson Button este año. ¿Habría entrado Felipe Massa en Ferrari con un agente diferente a Nicolas Todt, el hijo de Jean Todt?
Anthony Hamilton.
Un mánager puede ofrecer el 'pack' completo. Por ejemplo, gestionando también el tema clave de la fiscalidad a través de un equipo de asesores.
Además, puede incluir la explotación de la imagen comercial a título personal y en función del margen de maniobra que deje el equipo. "Este deporte es muy complejo y muy rico en oportunidades profesionales", explica el representante de Bruno Senna, Chris Godwing, "los pilotos tienen ya una cierta dimensión global y aquí puede haber lugar para dos tipos de mánagers diferentes".
En este apartado de la imagen, el agente puede encargarse directamente de esta área o subcontratarlo empresas especializadas que trabajan, lógicamente, a comisión.
Existe un trabajo más cotidiano que el piloto, lógicamente, no puede asumir. "Tenga representante o no, no hay ninguno sin un asistente para los temas de prensa o alguien que se haga cargo del tráfico de llamadas y contactos". En este sentido, el mánager también puede cuidar de la logística privada y cotidiana de su piloto organizando áreas de su vida personal.
"Un brazo en torno a tu hombro"
El contraste entre Button y Hamilton plantea también el tema de ese "brazo consolador en torno a tu hombro" del que hablaba David Coulthard respecto al británico. "La vertiente emocional del mánager es crucial", explica Gené, "Hay dos figuras con quien los pilotos más tiempo pasan: el representante y el fisioterapeuta.
Es muy importante que haya una afinidad brutal, tan grande como con tu familia y amigos. Les cuentas absolutamente todo, dan mucha estabilidad, y si con alguno de ellos no te llevas bien, que ha habido casos, esto te afecta emocionalmente". Que le pregunten a Danielle Morelli y su experiencia con Robert Kubica tras el accidente del polaco.
O qué le pregunten al propio Hamilton. Debe resultar curioso que tu propio padre, de ser tu propia sombra y copartícipe de tu carrera deportiva, se dedique ahora en cuerpo y alma a cuidar de uno de tus rivales (Paul di Resta) cuando tú vives en plena crisis. Se dice que Lewis Hamilton se pasan las noches viendo la que se ha convertido en su película favorita, ya saben, 'Jerry Maguire'.
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