Crónica de un desahucio. Imágenes.
Azucena Paredes, una madre desempleada de tres hijos, a la derecha, y su novio Odin pasean a sus perros por la mañana temprano antes de ser desahuciados en Madrid.
La joven Azucena prepara a uno de sus hijos para ir al colegio antes de que se produzca el desahucio.
La abuela de Azucena, Tomasa Morcillo, de 87 años, recoge sus pertenencias personales, antes de que ella y su familia sean desalojados de la casa
Un manifestante es reducido por la policía durante la protesta organizada para detener el desalojo de Azucena Paredes y su familia.
Azucena termina de empaquetar sus pertenencias personales con la ayuda de un familiar momentos antes de su desalojo en Madrid.
La joven madre no puede reprimir las lágrimas ante el inminente desahucio.
La policía llama a la puerta para iniciar el desalojo de la familia.
Tomasa, la abuela de Azucena, espera en el salón preparada para dejar la casa en la que ha estado viviendo.
Azucena escribe un mensaje en su teléfono móvil durante la protesta para evitar el desahucio en Madrid.
Azucena Paredes, madre de tres hijos, desempleada, con su abuela a su cargo, ya no tiene un hogar donde vivir.
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