De apenas un habitante, la ciudad más pequeña de Estados Unidos será
subastada al mejor postor con su colegio y su estación de gas.
Por el precio de lo que costaría un departamento de una habitación en muchos lugares del mundo y mucho menos que en ciudades grandes, el comprador obtendrá un terreno de 40 kilómetros cuadrados, una casa de tres habitaciones y un garaje, y una torre de telefonía celular.
El poblado, una antigua encrucijada ferroviaria, llegó a tener 2.000 habitantes, pero cuando la red de tren suspendió esa parada en su ruta, los habitantes comenzaron a trasladarse gradualmente a otras zonas.
El actual dueño, Don Sammons, de 61 años, se trasladó con su familia a Buford desde California en 1980. Pero su mujer murió hace años y su hijo creció y se fue a otro lugar, dejándolo solo.
"Estoy llegando al punto en que pienso en retirarme", dice Sammons, quien se describe como el alcalde, añadiendo que ha pasado "años maravillosos" en el poblado.
El anuncio en línea de la subasta (www.auctionnetwork.com) señala que la propiedad "incluye un puesto de gasolina disponible 24 horas, los buzones de correo de Estados Unidos y una escuela construida en 1905 que se utiliza actualmente como un edificio de oficinas".
Todo aquel que esté interesado debe registrar su interés antes del miércoles que viene, previo pago de un depósito de 50.000 dólares.
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