lunes, 6 de febrero de 2012

Exclusiva. Capirossi: “Pude correr gracias a mi familia, llegaron a hipotecar nuestra casa”

Era 1 de septiembre de 2011. El Mundial de MotoGP llegaba a Misano. Loris Capirossi utilizaba la rueda de prensa para hacer oficial la noticia de su adiós a las carreras. Con lágrimas en los ojos, se despide después de 22 años y 328 carreras. Charlamos con Capirex, vinculando aún a la velocidad, recorriendo su carrera deportiva y le pedimos opinión sobre la temporada que está a punto de arrancar.



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Año 1973. Capirossi, como muchos otros pilotos italianos, nace en uno de esos pueblos de la Romagna italiana entre Bolonia y Ravenna. Y, como buen romagnolo que se respete, nace con una pasión innata por las motos y por la velocidad. 

A los quince años participa en su primera temporada de carreras de velocidad y se clasifica sexto en el Campeonato Italiano Sport Production. Después de varios años con buenos resultados nacionales y, sin tener aún la edad, debuta a nivel mundial en 1990, en la categoría de 125cc. 

El título fue suyo, para sorpresa de muchos, y con él también el récord del piloto más joven en conquistar un título mundial. El siguiente año continúa la sorpresa y se adjudica de nuevo el campeonato, con más victorias y más ventaja, aumentando así el interés de los italianos, y de los no italianos, por el mundo de la motos.

Pregunta. ¿Cómo llegaste a las motos?

Respuesta. Todo nació, probablemente, de una pasión de mi padre. Cuando tenía solo cuatro años, él me construyó la primera minimoto. Empecé a rodar por los campos y ahí nació la pasión. Después, he llegado donde he llegado.

P. ¿Cuál fue la reacción de la familia a tu decisión de competir?

R. Como todos saben, nuestro deporte es bastante costoso y pude correr gracias a mi familia, que me ayudó siempre. Fueron mis únicos patrocinadores, sobre todo al inicio de la carrera. En una ocasión llegaron a hipotecar la casa. Mi padre estaba, sin duda, conmigo, y mi madre no siempre estaba demasiado de acuerdo. Pero tuvo en cuenta mi pasión y, al final, ella también empezó a creer.

P. ¿Cuándo te diste cuenta de que el motociclismo te podía dar para vivir?

R. Realmente, nunca. Yo siempre he hecho esto por pura diversión. Creo que el deporte a alto nivel debe ser un juego y, en el momento en que se convierte en un trabajo, es mejor parar. Yo, después de tantos años de carrera, había llegado a un punto en que todo era difícil y no me divertía como antes. Es por eso por lo que decidí parar.

P. Durante estos veinte años de carreras has pasado por muchos equipos. ¿Cuáles han sido los cambios principales que te han ayudado y dónde te has sentido mejor?

R. En todos estos años he corrido en muchísimos equipos diferentes y debo decir que me he encontrado bien en todos. Me las he arreglado para tener una excelente relación con todas los equipos en los que he estado y ahora soy amigo de todos. Desde el equipo Pileri, el equipo histórico con el que corrí desde 1990 hasta 1995, hasta el mundial que gané con Aprilia, pasando por los cinco años de Ducati. 

Con todos. También estuve muy a gusto los tres años que pasé con Suzuki, casi hasta el final de mi carrera, y también con el Pramac, el equipo del año pasado, un equipo italiano compuesto por personas fantásticas. Me las he apañado para tener siempre alguna cosa buena en todos los equipos en los que he corrido y estoy muy orgulloso de ello. Creo que volvería a tomar las mismas decisiones, buenas o malas, porque me han ayudado a crecer.

P. ¿Cuál es el momento que recuerdas como el más emocionante?

R. Aunque sea una época pasada, el momento más emocionante fue cuando gané mi primer mundial, el Australia, en 1990. Es el momento que, aún hoy, revivo con más alegría, porque era un chaval y probablemente nadie se esperaba una cosa así. Fue lo máximo.

P. Vayamos a 1998. Mundial de 250. En la última vuelta de la última carrera, decisiva todavía para el campeonato, tuiste el incidente con Tetsuya Harada. Entraste en la curva de manera agresiva, investigaron, pero al final no fuiste penalizado.

R. Hubo mucha confusión por aquel adelantamiento. Se habló mucho en aquel momento. El derecho deportivo me dio la razón al cien por cien y no me penalizaron bajo ningún punto de vista. Han pasado catorce años y lo volvería a hacer. Creo que cuando un piloto tiene la capacidad y el carácter suficiente, tiene que intentar hacer los adelantamientos más difíciles. Un adelantamiento como el que hice yo se ve cinco o seis veces al año, pero el mío dio mucho que hablar.

A pesar de eso, Harada y yo seguimos siendo amigos. Ahora lo veo todos los días, porque sus hijas frecuentan la misma escuela que mis hijos. El tiempo lo pone todo en su sitio. Seguro que en su momento sintió un poco de rabia. Yo gané el mundial y él lo perdió. Pero hay que decir que, si los dos estábamos ahí luchando, era porque los dos merecíamos el título.

P. Antes, los pilotos se especializaban en varias categorías y corrían mucho tiempo en una de ellas (me viene a la cabeza el ejemplo, por excelencia, de Ángel Nieto). Ahora, en cambio, los pilotos se arriesgan a pasar a la categoría superior sabiendo que no tienen motos competitivas. ¿Qué crees que ha cambiado?

R. En primer lugar, han cambiado los reglamentos. Antes un piloto podía convertirse en el héroe de una categoría, porque podía correr en la misma sin límite de edad. Ahora hay límites. Por ejemplo, en 125 el límite era de 26 años. En Moto2 no hay límite de edad, pero no hace falta porque todos los pilotos buscan llegar a MotoGP. Es, sin duda, la categoría más importante, donde hay más intereses desde el punto de vista mediático y de patrocinio. Todos intentan llegar a lo más alto del motociclismo, aunque no sea fácil por los momentos tan difíciles que estamos viviendo.

P. El campeonato empezará en unos meses. ¿Cómo ves la situación de Ducati y de Valentino?

R. Ducati está viviendo un momento que no es nada fácil. Han hecho un proyecto totalmente nuevo para la moto de este año. Personalmente, conociendo Ducati y conociendo en ambiente de las carreras, no será fácil para ellos. Deben mejorar muchísimo la posición del año pasado, que fue muy difícil para Vale y para el resto de pilotos Ducati, con una moto que no era competitiva. Este año, seguramente, lo harán mucho mejor, pero será un año intenso.

P. Danos tu punto de vista sobre los campeones de MotoGP que, en los últimos años, han dado que hablar: Jorge Lorenzo, Casey Stoner y Dani Pedrosa.

R. Jorge Lorenzo es, sin duda, un piloto con muchísimo talento. Tiene mucha garra. Cree mucho en lo que hace, siempre lo da todo y no tiene miedo a nada. Creo que es un piloto completo, ha ganado y volverá a ganar. Es un tipo de piloto que me gusta mucho. Está por ver si es capaz de ganar otro mundial, porque el problema es que compite con Casey, que es otro piloto con un talento increíble. 

En este momento, Stoner tiene la mejor moto. En la temporada pasada, sobre todo, Casey tenía la moto más competitiva y creo que la Honda es siempre la moto a batir. Cuando nos encontramos con la mejor moto y con uno de los mejores pilotos, es difícil. Creo que, al final, se jugarán el campeonato entre ellos dos, pero no hay que olvidar a Pedrosa. Dani es un piloto muy rápido pero muy desafortunado. 

No se cae con frecuencia, pero cuando se va al suelo siempre se hace daño y se queda fuera de juego. Si analizamos los pilotos fuertes en este momento, a parte de Valentino, que seguramente es uno de los pilotos más fuertes pero que tiene esos problemas con la moto, nos encontramos con Lorenzo, Stoner y Pedrosa, que son los tres candidatos favoritos al título.

P. ¿Cuáles son las diferencias entre Yamaha y Honda?

R. A nivel tecnológico y de potencial de inversión en el desarrollo, la Honda es, sin duda, más fuerte. La Yamaha siempre ha hecho una buena moto en los últimos años, pero siempre les ha faltado un poco de potencia en el motor a diferencia de la Honda, que el año pasado dio un salto importante y tuvieron una moto óptima. Predigo que, en 2012, la Honda será bastante similar. En cambio, la vuelta de las 800 a las 1000 se debe tener en cuenta. Honda siempre es Honda, y en Yamaha están a la caza. No será un año fácil.

P. También porque Jorge ha estado hasta ahora fuera de juego por el desarrollo de la nueva moto.

R. Lo que está claro es que Valentino hizo cosas importantes para el desarrollo de la Yamaha, pero creo que también Lorenzo ha sido muy bueno en el desarrollo. En Yamaha pueden seguir sus indicaciones para seguir adelante, con total seguridad.

P. Hablemos de los últimos años de tu carrera. ¿Qué hizo que siguieras corriendo durante años sabiendo que no tenías una moto competitiva?

R. Esto es muy tiste, sobre todo en los últimos tres años con Suzuki. Esperaba algo más. Corría con una moto oficial y trabajábamos para estar delante. Por desgracia, las posibilidades económicas y las inversiones que hacían para el desarrollo de la moto no estaban a la altura. Por eso, siempre estábamos persiguiendo a los demás. 

La moto no era mala, pero nos faltaba un poco para poder salvar la diferencia y poder estar con los mejores. Me disgusta, porque merecíamos más y trabajábamos para ello. Por lo que se refiere a mi última temporada con Pramac, firmé con ellos y con Ducati esperando que la llegada de Valentino nos echara una mano. En cambio, fue un año muy difícil. La moto no funcionaba y me hice daño en Holanda. En ese punto tomé la decisión de parar, aunque me hubiera gustado hacerlo en otras circunstancias y con mejores resultados.

P. ¿Por qué no esperar, entonces, otro año, teniendo a Valentino en Ducati ayudando a desarrollar la moto?

R. Mi opinión personal es que Ducati trabaja mucho en la moto oficial, mientras que los clientes (como los pilotos Pramac) tendrán una moto, de nuevo, que no será competitiva.

P. ¿Cuánto ha influido el matrimonio y la paternidad en tus resultados? Se dice que si tienes un hijo, no vas tan rápido.

R. Creo que eso es una estupidez. Hay muchísimos ejemplos de pilotos casados y con hijos que han ganado igualmente. Ya veremos que pasará con Stoner el próximo año, cuando se convierta también en padre. Creo que depende mucho de lo que uno mismo quiere y hay que saber dividir las dos cosas, la familia y las carreras. A mí, personalmente, no me ha cambiado nada. Solo ha cambiado una cosa: ahora soy mucho más feliz. Lo que te da un hijo no te lo puede dar ninguna carrera en el mundo, porque es un objetivo mucho más bonito.


P. Ahora te ocuparás de la seguridad. ¿Cuáles son tus proyectos de futuro en este ámbito?

R. Me estoy ocupando del desarrollo de los neumáticos. Estoy trabajando en contacto con Bridgestone y estaré con ellos en los test de pretemporada. Bridgestone, junto con Dorna, me pidieron estar presente para tener un contacto directo tanto con los pilotos como con los neumáticos. No haré los test, pero actuaré como enlace con los pilotos. Estamos trabajando, también, con los nuevos reglamentos.

 
P. ¿Cuál es el verdadero problema de los neumáticos?

R. Estas gomas no tienen problemas particulares. El problema viene cuando hay un neumático único y el desarrollo de las gomas se detiene o se ralentiza mientras que el desarrollo técnico de las motos continua avanzando mucho más. Entonces ocurre que las prestaciones de la moto se mejoran mucho, mientras que las de las gomas no evolucionan. 

Es ahí cuando surgen las dificultades. Además, hay que tener en cuenta que las condiciones atmosféricas que nos hemos encontrado en estos últimos años han sido siempre muy duras, pasando de temperaturas cálidas a los diez grados. En estos casos es difícil hacer funcionar una goma en todas las temperaturas. Por eso, Bridgestone está trabajando mucho para ofrecer a los pilotos un neumático con un rango más amplio.

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