De la cola del INEM al sofá y de una película de serie B al ordenador a mandar currículos a la desesperada. Nueve millones de españoles no saben cómo ocupar sus días. Las empresas no contratan lo suficiente, los bancos dan pocos créditos y el telediario no hace más que dar vueltas al tema de la crisis.
Para aprovechar la energía desaprovechada de sus vecinos, varios ayuntamientos están contratándolos para arreglar sus calles y parques. Un ejemplo es el de Talavera (Toledo), que ha desarrollado un sistema muy eficaz.
Por un lado los desempleados del: albañiles, jardineros, comerciales y delineantes. Las demandas de los vecinos por el otro: colocar una valla en el parque infantil, limpiar las alcantarillas o borrar las pintadas de las fachadas. Después de visitar los barrios de la ciudad, los técnicos de Ipeta (Organismo Autónomo Local) realizan un informe del que saldrán los contratos y los objetivos.
“Tenemos unas 22 visitas cerradas para conocer perfiles y deficiencias por barrios”, ha explicado la concejala de Empleo y Promoción Económica de Talavera al medio local latribunadetalavera.es. Aunque todavía no saben el número exacto, en años anteriores el ayuntamiento ha contratado a 800 vecinos en el paro.
Pero el municipio manchego no es el único. Otros como el de Mataró (Barcelona) también realizan iniciativas similares. Más de 80 vecinos trabajan desde enero en los espacios públicos de la localidad catalana dentro del programa 'Trabajo en los barrios'.
Otro ejemplo es el de la alcaldía de Icod (Tenerife). El año pasado 37 desempleados locales mejoraron los senderos de la zona. Además, la construcción de muros y pasarelas o la retirada de residuos han mejorado la calidad turística del lugar.
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