Aguirre, el PSOE y el “chau chau” sindical

La presidenta de Madrid afirma que la reforma laboral pondrá fin a los pactos “de señorita Pepis” de socialistas y sindicalistas

 

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha defendido la reforma laboral impulsada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, y ha sostenido que esta iniciativa pondrá fin al "chau chau" del PSOE con los sindicatos para no pactar nada más que "reformas de la señorita Pepis". "Deberían reflexionar, meditar. Que se quejen de reforma laboral de PP, que por fin va a dejarse de pamplinas y del chau chau con sindicatos para no pactar nada más que reformas de la señorita Pepis", ha afirmado la presidenta regional en el pleno de la Asamblea de Madrid preguntada por la portavoz adjunta del PSOE Maru Menéndez sobre la reforma laboral.

"Conculcan el principal derecho de los trabajadores, a trabajar", ha acusado Aguirre a Menéndez, a la que ha dicho que es "una vergüenza" que los socialistas sean "como los pirómanos", que crean los parados y luego se quejan "cuando llegan los bomberos", a los que ha comparado con los 'populares. "Pretenden con algaradas callejeras lo que no han ganado en las urnas", ha apuntado Aguirre, que ha acusado a los socialistas de promover "el paro". Y es que a juicio de la presidenta, "el problema en España es que no se favorece la contratación porque los sindicalistas quieren impedir que se contrate libremente en España". . 

En el lado opuesto, Menéndez ha explicado que los socialistas rechazan la reforma laboral porque "ataca frontalmente los derechos de quienes ya tienen trabajo y aspiran a tenerlo", y ha apuntado que la reforma recién aprobada "otorga todo el poder a los empresarios y vulnera derechos constitucionales".

"Pedimos la retirada de la reforma", ha señalado y ha tildado esta iniciativa de "contrarreforma". "Es una contrarreforma que pretende el despido y recorte de salarios, el retroceso en derechos de trabajadores y anula la capacidad de negociación de los sindicatos", ha resaltado y ha indicado que "la conflictividad no la promueve el PSOE, Rubalcaba o los sindicatos".

"La promueve Mariano Rajoy y Esperanza Aguirre con una contrarreforma que suprime instrumentos en las relaciones laborales", ha concluido.