Vídeos._ Adelanto del nuevo disco de Bruce Springsteen

Ya se conoce lo nuevo de Bruce Springsteen. Su título es Wrecking Ball y saldrá a la venta el próximo 5 de marzo. El disco lo ha dado a conocer la tienda iTunes de Apple, donde aparece la portada, el listado completo de canciones y el sencillo We Take Care Of Our Own, ya a la venta en Estados Unidos y que suena así.
  

 http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=M3Bz0d2xm7U


Como con cada disco suyo, promete ser uno de los grandes acontecimientos musicales del año, por impacto comercial y publicitario. De nuevo, el músico de Nueva Jersey volverá a ocupar todas las portadas y espacios informativos. Es un hecho que se repite siempre. Auspiciado por la poderosa Sony y, sobre todo, por la marca que es desde hace años el nombre Springsteen en el mundo de la música, el cantante estadounidense saca su nuevo álbum con las filtraciones, normalmente interesadas por parte de la compañía, previas a la campaña publicitaria.

La revista Pointblank, dedicada al músico, venía informando puntualmente estos días sobre lo que se cocía dentro de su entorno. Dicen que Bruce Springsteen “está más enfadado que nunca”, que el cantante muestra una actitud inconformista ante la situación económica y social de su país, plasmada en canciones nada complacientes. Hay títulos ilustrativos al respecto: Easy Money, Death to my Hometown, This Depression o Jack of All Trades.


Siempre se hace difícil apreciar y creer en el inconformismo de alguien como Springsteen que, como músico multimillonario y llena estadios, vive en una posición privilegiada, pero está claro que el músico norteamericano, sin valorar aquí el grado de honestidad de su obra, consigue como pocos llegar a su amplio público con mensajes aparentemente sencillos y universales sobre las relaciones humanas y el papel del ciudadano, el hombre corriente, ante su comunidad o la alienación social y económica.

Es su gran virtud pero también la parte más criticable por parte de sus detractores que califican su mensaje de oportunista con tintes de salvapatrias.
Por unas cosas u otras, de cualquier manera, su manager Jon Landau ya ha salido al paso en la revista Rolling Stone para decir que las canciones fueron compuestas antes de que surgiese en Estados Unidos el movimiento Occupy Wall Street (del mismo espíritu crítico e indignado que el 15M en España) y no tienen una relación directa con él.

En la carrera artística de Springsteen, siempre ha habido un extraño juego de ambigüedades, una estudiada necesidad de no mojarse e implicarse en determinadas controversias o aspectos políticos dejando que la música siempre hablase por sí misma. Porque, según el autor de Born To Run, todo lo que tiene que decir ya está en su música. En los últimos tiempos, esta máxima se la saltó para implicarse en la campaña contra el Gobierno de George W. Bush y, posteriormente, apoyar a Barack Obama. 

De hecho, hizo coincidir la salida del precipitado Working on a Dream con la elección del actual presidente de Estados Unidos, como en un gesto simbólico tras pedir la salida de Bush y criticar su gestión en giras por todo EE UU y publicar el sobresaliente Magic, donde latían la rabia y la indignación con el curso que seguía su país. Tal vez, por eso, con Obama en la Casa Blanca, Springsteen quiera mostrar un enfado abstracto y desde su compañía de discos no quieran relacionarlo desde ya mismo con ningún movimiento ni buscar dianas a sus canciones. En palabras de su manager: “Tiene una dimensión espiritual muy pronunciada”. Se dice mucho al mismo tiempo que no se dice nada.

Musicalmente, Landau ha adelantado sobre el disco, producido por Ron Aniello: “Es una obra experimental con un nuevo productor. Un disco de rock que combina elementos clásicos del sonido de Bruce con su experiencia con la Seeger Sesions Band, junto a nuevas texturas y estilos”. Miedo da oír la palabra experimental en según que obras y músicos y en este caso, al parecer, en esas texturas se incluyen apuntes varios como bases electrónicas o coqueteos con el hip-hop.

Los miembros de la E Street Band tocan en el disco, además de otros músicos invitados como Tom Morello, ex Rage Against The Machine, y el baterista Matt Chamberlain, ex Pearl Jam. Sin Clarence Clemons ni Danny Federici, dos de los miembros fundacionales de la E Street Band, será muy difícil hallar la esencia de la banda de la calle E, que basó su mejor sonido en el viento del saxo y el juego de teclados, pero será interesante ver cómo afronta Springsteen estos inconvenientes tanto en el álbum como en la posterior gira.

A la espera de la salida del álbum, el adelanto parece esconder el alma de The Rising, intentando dar con un rock raramente contagioso (y dócil), dejando espacio a la instrumentación de cuerdas, las palmas y unos coros finales, pero sin la gracia fantástica de su mejor versión en la época de The River. Si realmente está enfadado con la que está cayendo, yo agradecería mucho más nervio o sangre.

Más carretera para radiografiar a la América que sufre el desplome económico, como hiciese en Nebraska, Darkness on the Egde of Town o The Ghost of Tom Joad. Agradecería más este espíritu de otro tema que se incluye en el disco como bonus track, American Land (con homenaje al gran Clarence Clemons en el vídeo), una de las tres canciones ya conocidas del cantante que están en el disco:

Bruce Springsteen - American land (Live Glastonbury 2009)

 http://www.youtube.com/watch?v=6lcvpmvcs6U&feature=player_embedded

Canciones del disco:

    We Take Care of Our Own
    Easy Money
    Shacked and Drown
    Jack Of All Trades
    Death To My Hometown
    This Depression
    Wrecking Ball
    You’ve Got It
    Rocky Ground
    Land of Hope and Dreams
    We Are Alive
    Swallowed Up (Bonus Track)
    American Land (Bonus Track)