Javier G. Gómara
Miranda
Me cansa mucho el tema de los árbitros.
Es la historia de siempre desde que tengo uso de razón, pero de vez en cuando toca darle una vuelta de tuerca al asunto. El Atlético fue perjudicado ante el Barcelona.
Como lo fue ante el Sporting o en una decena de partidos desde que comenzara el campeonato. “Al final los árbitros te dan y te quitan”, promulgaba ayer un Simeone que aparca su lado más visceral cuando se sienta ante los periodistas para dejar paso al pausado y sereno.
Puede que el argentino tenga razón si se refiere a 18 equipos de la Liga. Es más, estoy seguro de que la tiene. Está en su papel de mantener esa calma, como ha hecho durante mucho tiempo Guardiola y como nunca ha hecho Mourinho, que ahora sí está obteniendo réditos a tanto llanto y macarranería. Es comprensible.
Lo que sí echan en falta tanto los aficionados como los propios jugadores es que alguien de la zona noble se baje al fango para defender los intereses del Atlético como ellos hacen desde la grada y desde el terreno de juego respectivamente.
Hoy es Miranda el que lo reclama desde estas páginas. “El club debe tomar cartas en el asunto. Pueden costarnos (los errores) esos cinco o seis puntos que podemos echar mucho de menos a final de temporada”, asegura el brasileño, un recién llegado a este equipo y a esta Liga pero que ya se va enterando de qué va todo esto.
Más que los errores, inherentes a los colegiados como a todas las personas, es la actitud que éstos muestran en unos y otros estadios y ante unos y otros equipos lo que más enfada. Y si hay que llorar para mamar...
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