El mítico jugador de la historia del Atlético de Madrid, que falleció el pasado octubre de 2010, cumpliría hoy (miércoles) 55 años de edad. Su garra, su espíritu, su amor por los colores, sirven de motivación a la plantilla rojiblanca para encarar el encuentro frente al Real Madrid y poner fin a 12 años sin conocer la victoria contra el conjunto merengue.
“La muerte llama, uno a uno, a
todos los hombres y a las mujeres todas, sin olvidarse de uno solo
-¡Dios, qué fatal memoria!-, y los que por ahora vamos librando,
saltando de bache en bache como mariposas o gacelas, jamás llegamos a
creer que fuera con nosotros, algún día, su cruel designio”. Así definía
el escritor Camilo José Cela a la muerte. El Premio Nobel de Literatura
de 1986 padecía una patología cardiorrespiratoria crónica en fase
terminal en los últimos años de su vida, la causa de su muerte en 2002.
Para un enfermo de cáncer, cada día supone un reto nuevo.
En ocasiones, un espíritu fuerte y bregador no es suficiente para
saltarse los decretos que impone la madre naturaleza. El 13 de octubre
de 2010 un corazón, bañado en sangre roja y blanca, paraba de latir para
siempre. Juan Carlos Arteche decía adiós a la edad de 53 años a causa de un cáncer. Insignia rojiblanca, bandera que se izaba en contra de las malas gestiones de la directiva y emblema de la grada, Arteche animaría desde el cielo al Atlético de Madrid.
Porque como reza uno de los cánticos que corea el Vicente Calderón: “ni la muerte nos va a separar, desde el cielo yo te voy a animar. A mí no me interesa en que campo juguéis, local o visitante yo te vengo a ver […] daría la vida por verte campeón.
Del Atleti soy y tu eres la alegría de mi corazón”.
Pero, ¿por qué razón Arteche juega el derbi contra el Real Madrid si ya patea el balón en el cielo?
El central cántabro nació un 11 de abril de 1957. Hoy miércoles, día
que se celebra el derbi contra el Real Madrid en el Vicente Calderón a
las 22.00 horas, Arteche cumpliría 55 años de edad si
un maldito tumor de riñón no se hubiera interpuesto en su vida. “Un día
me levanté y oriné coñac. Hacía 20 años que no tomaba coñac y fui al
médico.
Si no consigo parar el tumor, acaba conmigo”, recordaba Arteche en una entrevista
un año antes de fallecer. El diagnóstico llegó tarde: un tumor de 14
centímetros que obligó a ser intervenido de urgencia para extirparle el
riñón; 3 meses después le descubrieron ganglios afectados y tuvo que
pasar de nuevo por el quirófano. Allí estaba Rosa, su mujer.
Recordando a Juan Carlos Arteche
Arteche cumpliría 55 años de edad si un maldito tumor de riñón no se hubiera interpuesto en su vida
Arteche tenía dos pasiones en su vida: Rosa, con la que compartió más de media vida. Y como no, “su Atleti”. Me mata, me da la vida.
Con la melodía del himno tradicional del Atleti – “el de toda la vida,
no el de Sabina”, como solía recordar – en su móvil, Arteche se dejaba
ver por el paseo de Yeserías.
Una persona humilde a pesar de su apariencia bravucona, bigotudo y con mirada asesina. El Vicente Calderón le amaba, se lo demostraba cada domingo y le bautizó como Artechenbauer por su condición de central rudo y que no se andaba con chiquitas. La raza, la bravura, la casta y el orgullo para defender el linaje colchonero cada vez que se enfundaba la camiseta del Glorioso.
Mientras muchos confunden el mensaje de la importancia que tiene ganar
este derbi, Simeone ha procedido a dar una clase magistral en rueda de
prensa sobre que es el Atleti y su historia. Por un momento, el Cholo revivió de nuevo a Artenchebauer. “Nosotros somos el Atlético de Madrid y como tal tenemos que pensar en los objetivos que tenemos por delante. Nada más. Los tres puntos nos sirven a nosotros para seguir creciendo como equipo”.
El
enfrentamiento contra el rival de la ciudad tiene la importancia de
conseguir los tres puntos, el barco que lleva a clasificar a los puestos
europeos, además de terminar con la lacra que asola la historia
rojiblanca, con 12 años agachando las orejas cada vez que el “indio” se encuentra al “vikingo” en el trabajo a la mañana siguiente.
Estará presente en el derbi: "ni la muerte nos va a separar, desde el cielo yo te voy a animar"
No hay comentarios:
Publicar un comentario