DESDE FERRANDO EL 'ATLETI' NO ESTABA CUATRO PARTIDOS SIN ENCAJAR UN GOL
Simeone, el lunes en Pamplona.
"Compacto, junto, intenso…" son atributos del nuevo Atlético de Madrid, el dirigido por Diego Simeone, quien ha conseguido en los cuatro partidos que lleva al frente del equipo una misión anhelada por todos los aficionados: conseguir seriedad y regularidad defensiva.
Los adjetivos que abren el artículo los pronunció este martes el delantero rojiblanco Adrián, horas después de que su equipo ganara 0-1 en Pamplona. Este resultado sirvió para sumar diez puntos de doce posibles y, lo que es más importante y causa principal de lo anterior, conseguir una racha de cuatro choques completos sin encajar ningún gol.
Iguala una marca de imbatibilidad que no conocía el Atlético en Liga desde la temporada 2004/05, cuando entrenado por César Ferrando consiguieron ganar 3-0 al Sevilla, 1-0 al Valencia, empatar sin goles en Zaragoza y superar con un 4-0 al Mallorca. Aunque aquella no fue una buena temporada, porque los colchoneros acabaron undécimos, aquel plantel consiguió ser el tercer conjunto menos goleado de Primera (34 tantos), sólo por detrás de los dos primeros clasificados, Barça y Real Madrid.
Desde entonces, temporada tras temporada, el Atleti se ha caracerizado por poseer equipos con gran poder ofensivo (más por individualidades como Torres, Agüero, Forlán, Maxi, Simao, etc.) pero poco fiables en la retaguardia, lo que a la larga le hacía un equipo capaz de ganar a cualquiera, pero también capaz de perder hasta con el más modesto de los equipos.
La llegada del Cholo ha cambiado bruscamente esa tendencia, dejando parada en 27 la casilla de goles encajados. El empate a cero de su debut en Málaga ha dado paso a tres victorias consecutivas (3-0 al Villarreal, 0-4 a la Real Sociedad y el citado 0-1 a Osasuna) que demuestran que su Atleti ha echado el cerrojo.
Simeone ha comenzado a construir la casa de abajo arriba, con un ideario claro donde el orden defensivo y el sacrificio colectivo da pie irremediablemente a la agresividad ofensiva. Defensas como Godín o Miranda, que mostraron con Gregorio Manzano su peor cara, parecen ahora jugadores totalmente diferentes. El uruguayo, incluso, resultó decisivo en el partido del lunes haciendo el único gol del encuentro.
Gol partita que dicen en Italia, precisamente el país donde más se venera dejar la puerta a cero.
Pero en el Manzanares no quieren lanzar aún las campanas al vuelo.
El propio Adrián aconsejaba estar tranquilos porque las rachas igual que vienen se van. Para eso sirve también de ejemplo la temporada de Ferrando: después de conseguir aquella marca de imbatibilidad, encadenó una racha negativa de ocho partidos seguidos sin ganar, por los que cerró la temporada entre los silbidos de la grada del Vicente Calderón.
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