Primero Segolène dejó a François y él se lió con Valérie, luego Nicolas venció a Segolène y rompió con Cecilia para terminar casándose con Carla. Ahora la mujer de Strauss Kahn hará de comentarista en un programa post electoral. En Francia las "celebrities" están robando protagonismo a los "aburridos discursos" políticos de siempre y están pintando de rosa las elecciones.
Primero Segolène superó a François (Hollande), luego Nicolas venció a Segolène antes de romper con Cecilia y casarse con Carla. Mientras tanto, Segolène se separó de François y él se lió con Valérie. Después de los problemas de Dominique, François humilló a Segolène, pero lo hicieron para que ella pudiese ayudarle a vencer a Nicolas.
El elenco de maridos, esposas, novias y ex parejas protagonizando el argumento secundario de una telenovela para las elecciones presidenciales de Francia puede parecer confuso, pero los columnistas parisinos de cotilleos y las revistas del corazón no parecen cansarse.
Con su marido rezagado en las encuestas de opinión, la primera dama Carla Bruni-Sarkozy, está desempeñando un papel cada vez más visible en la campaña electoral para la primera vuelta de los comicios del 22 de abril.
La ex supermodelo convertida en cantante y actriz dio a luz a Julia, la hija del presidente Nicolas Sarkozy, en octubre. Sus apariciones frecuentes en la campaña y las entrevistas han tratado de presentar una imagen más amable y más suave del notoriamente irascible presidente.
“Gracias a Nicolas estoy viviendo una aventura extraordinaria”, declaró recientemente Bruni-Sarkozy a la revista Elle en una entrevista en la que describe cómo el presidente se afana todas las horas, en pro del bien de la nación, respeta a las mujeres y le encanta escucharle tocar la guitarra.
“Esta posición ha dado a mi vida una nueva dimensión”, prosiguió. “En medio de estas graves crisis, me permite entender los temas decisivos de nuestro país, por lo que puedo abrir los ojos a la vida de otros, los franceses, y prestar más atención a sus problemas”.
Mientras tanto, la periodista Valérie Trierweiler ha añadido un toque de glamour a la campaña como la compañera del principal rival de Sarkozy, François Hollande.
Autoproclamado como un “hombre corriente”, el candidato socialista está liderando las encuestas pero a menudo es descrito como bastante aburrido. A Trierweiler se le atribuye conseguir que su hombre haya perdido algo de peso y vista con un poco más de gancho.
“Eso no es cierto. Él perdió peso por su cuenta y yo le amaba tal como era, aunque tuviese unos cuantos kilos de más”, dijo Trierweiler en su propia entrevista con Elle. “No sentí ninguna necesidad de cambiarle, lo que me gusta en él va más allá de todo eso”.
Trierweiler ha sido coincidente con Bruni-Sarkozy en cuanto a la atención de los medios de comunicación.
El sitio web de aufeminin.com calificó el “potencial fashion” de la “periodista con una confianza elegante” en contra de Bruni-Sarkozy, una “artista de primera clase, con encanto.
Teniendo en cuenta factores tales como la “actitud fría” y el “potencial para seducir a los franceses”, la revista femenina líder a nivel mundial declaró como ganadora a Bruni-Sarkozy, pero sólo por dos puntos.
Trierweiler también tiene que enfrentarse a la competencia por el centro de atención de la ex de Hollande.
Segolène Royal fue compañera de Hollande durante más de 20 años. Tuvieron cuatro hijos juntos y siguieron carreras paralelas a través de la jerarquía del Partido Socialista, hasta que elle le derrotó en la carrera por convertirse en el candidato del partido en la última elección presidencial. La víspera de la derrota de Royal frente a Sarkozy en 2007, la pareja anunció que ya no estaban juntos.
Hollande tuvo su revancha en las primarias del año pasado del Partido Socialista, anotando cinco veces más votos que Royal. Su decisión de unirse a él en el escenario en un mitin de campaña la semana pasada fue un significativo evento mediático.
“La causa que estamos defendiendo es más grande que nosotros”, dijo Royal a losperiodistas. “Eso es lo que nos permite dejar el pasado atrás y mirar hacia el futuro”.
Más en el campo de Sarkozy, los partidarios del presidente han sido acusados de usar a a la ex esposa del presidente, Cecilia Attias como el chivo expiatorio para el estilo de vida de ostentación que marcó el inicio del mandato de Sarkozy y que ha sido una fuente constante de críticas desde entonces.
Fue ella quien estuvo detrás del estilo de Ray-Ban y Rolex del presidente, según dice una nueva biografía de Sarkozy. Los cruceros en el yate de un multimillonario y cenas en un restaurante pijo de los Campos Elíseos “fueron todos para agradar a Cecilia”, dijo un legislador pro-Sarkozy, citado en la revista VSD la semana pasada. “Estaba realmente enamorado y quería reconquistarla”, añadió el político anónimo.
Más allá de todo el proceso electoral de dimes y diretes, tanto Bruni-Sarkozy como Trierweiler han tratado de marcar puntos importantes sobre el rol de las mujeres en Francia. Trierweiler twiteó con disgusto que estaba siendo reducida a un mero objeto decorativo del brazo de un político cuando Paris Match, la revista para la que escribe, sacó una foto suya con el titular: “El encantador activo de François Hollande”.
Trierweiler ha elogiado a Bruni-Sarkozy como un modelo a seguir por conseguir combinar la crianza de un niño con sus deberes como primera dama, trabajos de caridad y una carrera. Bruni-Sarkozy también salió en defensa de Trierweiler después de las sugerencias de que debía restringir su carrera debido a su relación con Hollande. Durante la campaña, Trierweiler ha cambiado su enfoque periodístico desde la política a la cultura.
Mientras tanto, otra famosa periodista y esposa de un político está a punto de hacer su reaparición en las pantallas francesas en la noche electoral. Anne Sinclair, editora de la edición francesa del Huffington Post, comentará los resultados para la televisión BFM.
Está casada con Dominique Strauss-Kahn, que había sido el candidato favorito del Partido Socialista, hasta que fue acusado de agredir a una doncella en una habitación de hotel de Nueva York en mayo del año pasado.
Aunque los cargos fueron retirados, el escándalo arruinó la carrera política de DSK. Ahora se encuentra bajo investigación en Francia por las acusaciones de implicación en una red de prostitución.
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